El Kit de Trabajo
Utensilios Básicos para Teñir
En este capítulo repasaremos uno a uno los utensilios y materias primas que necesitarás para llevar a cabo esta experiencia de Teñido Culinario que, por su carácter de entretenimiento, requerirá un equipo bastante básico
La idea aquí es allanarte el camino para que puedas adquirir el kit de trabajo adecuado para teñir a un nivel doméstico. Como te comentábamos en el capítulo anterior, teñir y cocinar son dos actividades que se parecen mucho, y ahora lo vas a ver más claro aún. En este curso necesitarás materiales bastante básicos, nada que no tengas ya en tu cocina o que puedas comprar a un precio asequible, ya que la idea en esta experiencia de entretenimiento es que te compliques lo mínimo e imprescindible. A nosotros, que somos muy dados a Reducir, Reciclar & Reutilizar, nos encanta aprovechar utensilios que la gente suele tirar. Si estás atenta, siempre aparecen cosas interesantes como ollas, tapas, botes, tarros, cucharas, coladores, tendederos, etc., que, aunque sean viejos, van perfectos.
Nota: para tu comodidad, te hemos preparado otro capítulo con la “Lista de la Compra”
Cocciones
Fuente de calor
La necesitarás tanto para preparar los baños tintóreos como para teñir tus lanas. Elije la opción que más te convenga: vitrocerámica, cocina eléctrica de inducción (estas son las que nosotros solemos usar), hornillo eléctrico, cocina a gas o estufa a leña. Todas, cada una con sus pros y sus contras, son válidas.
Olla
Lo ideal es que sea de acero inoxidable (o esmaltada) ya que se trata de no alterar el tinte. No son las más baratas pero son duraderas y fáciles de limpiar. Es necesario que tenga tapa. El tamaño dependerá de la cantidad de lana que quieras teñir. Con una olla de 4 o 5 litros podrás dar tus primeros pasos.
Medición
Jarra medidora
Aunque en Tintes Naturales se usan para muchas otras cosas, en este curso solo la vas a necesitar para medir el vinagre. Por eso no te tienes que complicar ya que, con que puedas medir líquidos, te bastará. A nosotros nos gusta que sean de cristal.
Balanza
Este utensilio es necesario ya que, como en cualquier otra receta, necesitarás medir los diferentes pesos. Te bastará con una balanza de cocina. Da igual que sea mecánica o digital, lo importante es que mida en gramos de la forma más precisa posible, especialmente si vas a teñir cantidades pequeñas.
Termómetro (opcional)
Aunque no es imprescindible, sí que es recomendable tener uno ya que te servirá para controlar la temperatura de los baños. Hay de muchos tipos. Los que nosotros solemos usar son los electrónicos portátiles con sonda que se usan normalmente en la cocina. Los hay de todos los precios, algunos muy económicos. Nota: Si no consigues uno, ten la precaución de que la lana no llegue a hervir.
Reloj
Como en la cocina (o en cualquier otro campo en el que acontezcan reacciones químicas) necesitarás medir el tiempo de los procesos. No es exagerado decir que la variable tiempo es de las que más influyen en los resultados de teñido. Sirve cualquier reloj (lo ideal es que tenga alarma para que te avise).
Otros utensilios
Cucharón
Necesitarás un cucharón proporcional al tamaño de tu olla. Lo ideal es que sea de acero inoxidable. A nosotros (que somos un poco nostálgicos del Oficio) nos gustan más los de madera, lo que nos obliga tener uno para cada color para evitar que se mezclen los colores o se puedan llegar a producir manchas.
Colador
Lo usarás para colar los macerados. A nosotros nos gustan los que son cónicos (se suelen conocer como coladores chinos), pero cualquier otro te servirá. Procura eso sí que sea grande (todo depende de cuanta materia pienses colar) y que se ancle bien en el cubo o recipiente donde vayas a apoyarlo.
Tamiz y pinzas
Muchas veces ocurre que el colador es insuficiente para filtrar ciertas materias ya que, o bien están demasiado trituradas, o bien vienen directamente en polvo. Es por eso que puedes llegar a necesitar un tamiz que deberás fijar al borde del cubo con varias pinzas (te valdrán las que se usan para tender la ropa).
Cubo (bol o palangana)
Lo vas a necesitar para varias cosas (poner a remojo la lana, lavarla y moverla de un sitio a otro). Los hay de plástico, esmaltados y de acero inoxidable (nosotros usamos estos porque son mucho más duraderos y porque se limpian muy bien). Ayuda tener al menos dos, uno para lavado y mordentado y otro para teñido.
Tendedero
Te hará falta para secar la lana. Lo ideal es tener uno reservado para este fin, más que nada para evitar manchas pero, si lo limpias bien, puedes usar el que usas para tender la ropa y no necesitas comprar uno. El tamaño obviamente depende de la cantidad de lana con la que vayas a trabajar.
Materias primas
Jabón neutro
Lo necesitarás para lavar la lana ya que, de lo contrario, no captaría bien el tinte. No importa que sea líquido, en polvo, en escamas o en pastilla, lo importante es que sea neutro pues la lana (al ser una fibra proteica) sufre si la expones a baños alcalinos. Este mismo jabón es el que usarás para lavar tus prendas.
Lana sin teñir
Aunque este curso está orientado a teñir madejas, también puedes aplicarlo a telas o vellones. Por lo que veremos en el curso, a nosotros nos gusta usar lana orgánica tanto por temas de ecología y respeto animal, como de salud. Si tu lana no es orgánica, protégete y usa guantes cuando la laves.
Tintes
Como veremos en los capítulos dedicados a materias tintóreas, necesitarás diferentes tipos de alimentos para dar color a tus lanas. Los hemos dividido en 4 grupos: comestibles (ej: remolacha), bebibles (ej: café), aromáticos (ej: manzanilla) y de reciclaje (ej: cáscara de cebolla). La mayoría son fáciles de encontrar.
Vinagre
También vas a necesitar vinagre, tema al que le hemos dedicado un capítulo para que tengas claro para qué sirve y cuál debes comprar. Como veremos, básicamente tienes 2 opciones: o bien vinagre blanco de manzana, vino o arroz (enfoque culinario), o bien vinagre blanco de alcohol de limpieza.
Seguridad & Salud
Guantes
Son especialmente recomendables si trabajas con lanas no orgánicas y, más aún, en el caso de pieles sensibles, alergias o sensibilidad química. Nosotros usamos guantes finos de látex cuando no queremos perder habilidad en los dedos, y guantes gruesos de goma cuando lo que queremos es no quemarnos.
Mandil
Aunque no es imprescindible, sí que es práctico ya que te evita posibles manchas y resulta cómodo para trabajar (especialmente si tiene bolsillos y te da la opción de colgar un trapo para tenerlo a mano). Y si además fuese impermeable, pues mejor aún. Aparte, con esta indumentaria, te sentirás ¡en plena acción!
